Me parece mentira estar sentada escribiendo un post. Llevaba tanto tiempo sin hacerlo que subconscientemente había empezado a pensar que ya no lo haría nunca más. Pero tras varias peticiones de que siga y el haberme parado a pensar en lo bien que me sienta dedicarle un ratito cada semana a este rinconcito, he decidido retomar el vicio.
Parece mentira lo que pueden cambiar las cosas en los escasos dos meses que llevo sin aparecer por aquí. Creo que he empezado a dar pasos en la dirección adecuada y me está sentando genial. Espero que esta sensación dure mucho, porque creo que llevaba tiempo necesitándola.
Ya que yo estoy cambiando, el blog también va a cambiar un poquito. Me he dado cuenta de que una de las cosas que más me gustan es encontrar fragmentos de libros, películas, canciones, etcétera, que me conmueven de alguna manera, asociarles una imagen y colgarlos en mi facebook o en mi tuenti. Y como resulta que tienen buena acogida, he pensado en trasladar ese "hobby" si es que se le puede llamar así, a este pequeño espacio. A partir de ahora, además de imágenes de cosas que me gustan, intentaré poner en cada post algún texto que me apetezca.
Hoy os dejo un texto que compuse con las frases de una entrevista a Françoise Gilot, una de las mujeres de Picasso, en el Magazine de hace un par de semanas. Los que me conocéis sabéis que en esta ocasión, el texto, sí que tiene cierta relación con cierta parte de mi, pero ya os adelanto que no siempre es así. Hay muchos textos que me atraen por lo desconocidas que me son las sensaciones de las que hablan, o por lo atractivo que me parece sentirme, por momentos, actriz virtual de lo que dicen. A veces es sólo por las vueltas que me hacen darle a algunas cosas, o precisamente por lo contrario, por lo sencillos que parecen ciertos temas cuando uno los lee en palabras de otro.
Acompaño el texto con la obra de Peter Callesen. Me parece que va muy acorde al momento actual de mi vida. Trabaja con papel casi como único material. Defiende que es neutro y le permite llenarlo de significado, pese a su sencillez y a su cotidianidad.
"El fino papel blanco le da a las esculturas una debilidad que subraya el tema romántico y tragico de mis trabajos. Las esculturas de papel cortado exploran la mágica transformación de la hoja de papel en figuras que se expanden en el espacio que las rodea. El espacio negativo, plano, dejado por el recorte pone en contraste la realidad tridimensional que crea, aun cuando las propias figuras no pueden escapar de su origen plano."
Peter Callesen es danés. Me encanta la capacidad que tiene para convertir lo sencillo y cotidiano en especial, complejo, y siempre frágil. Su obra, además de una meticulosidad técnica increíble, en mi opinión, tiene un trasfondo muy interesante. A veces roza lo infantil, cuando colorea los fragmentos que recorta, y creo que pierde intensidad, pero tiene piezas que me encantan:
Que tengáis buen sábado. Prometo (re)aparecer pronto.