sábado, 15 de enero de 2011

(im)paciencia



Hoy es uno de esos días en que me gustaría meterme en una manta como la del dibujo y desaparecer hasta que al despertarme todo mereciera un poco más la pena. Los últimos ¿tres? años han sido bastante duros y el buen resultado final del que tanto habla mi madre no parece llegar. Siempre he sido impaciente, pero últimamente lo soy más aún, y todo esto ya empieza a desesperarme demasiado, si es que alguna vez no lo hizo.



He sacado algo de fuerzas y hoy posteo sobre una ilustradora que me encanta. Se llama Clare Owen y sus dibujos son completamente cursis, pero me parecen preciosos. Hacen que días como hoy parezcan un poco más tiernos.









Os invito a visitar su página y su blog.

viernes, 14 de enero de 2011

de otra forma


Hoy no sé por qué me he acordado de esos dibujos que nos enseñaban de pequeños en la clase de Plástica en que si mirabas podías ver tanto a una joven como a una anciana, según en el color que te fijaras. De pequeña, en los viajes, me pasaba horas muertas mirando a las nubes e imaginando formas extrañas. Por eso me encanta el trabajo de Sandrine Estrade.



Disfraza las cosas cotidianas que vemos en la calle de forma que consigue darles una apariencia mucho más divertida y amable. Su obra me parece muy interesante. Esa visión casi infantil de cambiar las cosas me resulta encantadora en la gente adulta. Si todos viéramos lo que ella ve, seríamos más felices.











Esta última es muy poco sutil, :P

jueves, 13 de enero de 2011

Minicosas que me gustan



Ahora que tengo mi propio blog, podré ir, poco a poco, presentándoos las minicosas que me gustan y que me sacan alguna sonrisilla cuando las veo por Internet.



Una de ellas son los diseños de Géraldine Klein. Conocí su obra al ganar un concurso de cosas que miniaturizaría para llevar siempre conmigo. Dije, sin muchas esperanzas de ganar, los abrazos, para poder llevarlos en el bolso y usarlos cuando los necesitara y me mandaron su reinterpretación de un abrazo miniaturizado, un precioso osito que ahora adorna mi coche. Es éste de aquí. ¡Me parece tan tierno!



De momento no tiene tienda en Madrid, pero sus diseños se pueden comprar por Internet. Me encantan los últimos pendrives que ha diseñado, son tan...¡comestibles!





El envoltorio es muy mono, una cajita pequeña de plástico, con el logo de la marca y el objeto envuelto en papel de seda fucsia. Yo aún la tengo guardada.

miércoles, 12 de enero de 2011

A vista de pájaro desde tan solo 1,60 metros de altura

Una de las cosas que más me gustan de las clases de Urbanismo son las imágenes aéreas de las ciudades. Se puede saber mucho de una ciudad con sólo verla desde muy, muy arriba. Quizá ese sea el problema del diseño de una ciudad, el saber traspasar la vista desde arriba y que lo que parece tan ordenadito en planta sea realmente habitable y sobre todo, para mi gusto, amable y encantador como para que a cualquiera le apetezca pasar al menos una temporada de su vida en esa ciudad.



Hace tiempo encontré esta imagen sobre los campos de tulipanes de Holanda que consiguió colarse sin ningún tipo de lista de espera en mi carpeta de fotos bonitas. No recuerdo el autor.

Hoy por casualidad me he topado con el trabajo de un diseñador de interiores, Florian Pucher, y me ha encantado. Se trata de su serie de alfombras Landcarpet. En ellas recrea las vistas aéreas de ciudades de todo el mundo. Me encantan las fotografías con que las ilustra, porque consiguen, si cabe, hacerlas todavía más deseables.Vemos, por orden, su visión de África, Europa, Los Países Bajos y de Estados Unidos.












Si alguno puede permitírselas, debe ser rápido, ya que sólo hay 88 de cada modelo.

martes, 11 de enero de 2011

La ley del más fuerte, o eso dicen.



Se me ocurrió regalarle por reyes a mi hermano Carlos un pez. Es uno de esos diminutos y coloridos peces tan felices que corretean (si es que se le puede llamar así) por las peceras de las tiendas, y que cuando llegan a la minipecera que les toca en tu casa se vuelven algo mustios.
Aparte de la adolescencia como motivo principal, imagino que añadí a la causa el hecho de que mi hermano es bastante despistado, y fue por eso que elegí un pez y no otro tipo de animal. Al menos el pez es silencioso y limpio, y no provocará ataques de reproches en casa. Mi hermano quería un conejo. La única opción que encontré, entre su ilusión desmedida y las rotundas negativas de mis padres, fue que llame al susodicho pez "Conejo".


El caso es que ahora, todas las mañanas siento la necesidad de ir a verle cada cierto tiempo, ya que tengo la sensación de que el pobre animalito tiene una tendencia innata a no sobrevivir, y me siento muy responsable por ello. Ayer preparamos por primera vez el cambio del agua. Todos somos más blanditos hoy día: de pequeña tuve peces y con el agua del grifo bastaba. A los de hoy hay que echarles bacterias en gotas y nosequéotracosa que quita el cloro del agua. Eso me ha traído a la mente que el otro día mi abuela me recomendó que tomara por la noche leche con azúcar tostada en una cacerola. Fue tomarlo y la tos desapareció. Hoy al hablar con ella me ha contado que cuando era pequeña, como no había dinero para más, era el único jarabe que podía tomar. Al abrir el armario de medicinas de mi casa, me ha entrado algo entre vergüenza y lástima. Imagino que lo mismo sentirían los peces que tuve de pequeña si vieran la despensa del de ahora.



Aprovecho y dejo fotos de una artista que me gusta desde hace bastante tiempo. Camilla Engman. Como nuestro nuevo animalillo no es tan fotogénico como su perro prefiero que le conozcáis a él. Se llama Morran y a Camilla le encanta. Espero que os despierte la misma ternura que a mi al verle.
-Invítame a cenar, Frank.
-¿Qué? ¿Quieres cenar conmigo?
-A las mujeres no nos gustan las preguntas.
-Cena conmigo.
-Demasiado autoritario.
-¿Cenas conmigo?
-¿Otra pregunta?
-Voy a cenar....Si quieres acompañarme...

(The Tourist)