I wish this was...

Cuando las luces se apaguen, quitándote la ropa en la parte de atrás de un Volkswagen se que estarás de camino a tu casa por la autopista de la nostalgia. Y cruzarás aquellos bosques azules sin darle importancia al sabor de las nubes. Pensarás en el tiempo que hace que nadie te dice algo tan dulce. Yo se que estarás escondida dejando la luz encendida, quedándote medio dormida, buscando en un sueño dónde está la salida. Quizás cuando estés más lejos que nunca, comprendas que nadie tenía la culpa y tal vez en ese preciso momento recuerdes que fui tan importante para ti que nunca te imaginé tan lejos. ¿Cómo pudimos llegar a perdernos? Estarás cambiando canales, leyendo revistas que nunca me harán entrevistas. Viviendo en la misma ciudad infinita, casualidades nos pierden de vista y hoy se van como si fueran hojas que al viento se le antoja llevarse hacia ninguna parte. No sé si debo contarte que estarás buscando alguien, que vuelva a ser como nadie. Estarás besando la nicotina. Serás Miss Caffeina, la reina del baile de antiguos alumnos, buscando un doctor que le quite los puntos a tu corazón disecado. Estarás tan segura de que me has olvidado que...




Candy Chang es una artista que vive en Nueva Orleans. Su objetivo es hacer las ciudades más agradables para la gente. Una de sus iniciativas que más me gustan es la de las fotos de hoy. Se llama I Wish This Was, y consiste en la colocación de pegatinas sin rellenar donde invita a los ciudadanos a expresar lo que les gustaría que hubiera en el punto en que pegan la pegatina. Dice que en su barrio hay numerosas tiendas cerradas, y también una gran carencia de algún tipo de tiendas en particular.



Las pegatinas son de vinilo y son fácilmente removibles.





Me encanta la forma en que consigue hacer de una intervención urbana y artística algo de todos, haciendo que cada uno se plantee de forma más o menos original y realista lo que le gustaría encontrar en un determinado punto.







En mi facultad el año pasado pusieron carteles en blanco donde pedían a la gente que pusiera qué tipo de espacios echaba en falta en la universidad. Entre las respuestas habituales (área de descanso, zona de café con sillones, más mesas para ordenadores...) se me ocurrió colar un Zara. Alguien con no demasiada capacidad para captar la ironía, o por pensar bien, alguien que había tenido entrega y no andaba de muy buen humor, lo tachó a conciencia. Por lo visto el arte no está bien visto en la facultad de Arquitectura.

Como última foto dejo una que probablemente el susodicho habría tachado, y que probablemente yo habría tachado de una de mis favoritas :)